En el último cuaderno de la serie China en el (des)orden mundial, los investigadores Gabriel Merino, Julián Bilmes y Amanda Barrenengoa se enfocan en las condiciones emergentes y las perspectivas que se abren para Nuestra América y el conjunto del Sur Global en el marco de la transición histórico-espacial en curso —con particular foco en el ascenso de China— y cómo se va configurando y perfilando un nuevo orden mundial multipolar.
En este quinto cuaderno Gabriel Merino, Julián Bilmes y Amanda Barrenengoa se abocan a abordar de forma conjunta dos de las tendencias de la transición histórico-espacial contemporánea del sistema mundial: la crisis económica estructural del capitalismo financiero global y el nuevo paradigma tecno-económico en disputa.
En este nuevo cuaderno, Gabriel Merino, Julián Bilmes y Amanda Barrenengoa, buscan dar cuenta de cómo se fue desarrollando la transición histórico-espacial y cómo se va configurando y perfilando un nuevo orden mundial multipolar. Para ello se detienen en los conceptos de hegemonía y orden mundial que analizan en relación con una periodización histórica que se inicia con la Segunda Guerra Mundial y llega hasta las disputas del presente.
Este tercer cuaderno se centra en la agudización de las contradicciones político-estratégicas de carácter estructural que desde 2014 han tomado la forma de Guerra Mundial Híbrida y Fragmentada (GMHyF). La creciente disputa por la reconfiguración del poder mundial —y su devenir en (des)orden y “caos sistémico”— se observa en los enfrentamientos entre distintas fuerzas político-sociales, fracciones y clases sociales y pujas interestatales que afectan indefectiblemente a todos los Estados del mundo.
En este segundo cuaderno reconstruimos el proceso de ascenso de Asia-Pacífico, en general, y China, en particular, a partir del análisis de tres etapas desde la Revolución China de 1949 hasta el presente, recorriendo las áreas donde se despliega la superioridad estatal y el proyecto geopolítico del gigante asiático.
La pandemia que enfrenta la humanidad ha puesto de manifiesto con mayor visibilidad la magnitud de la crisis y transición del sistema mundial en que nos encontramos; a la vez que se pone de manifiesto, con mayor intensidad, el declive estadounidense y occidental frente al ascenso de Asia-Pacífico, con China a la cabeza.